Ésta famosa mesa fue creada en 1944 por el escultor estadounidense de origen japonés, isami Noguchi.
Concebida inicialmente como una mesita de té, fue diseñada en plena ebullición del movimiento orgánico. El diseñador creó este clásico, al que otorgó su nombre, para el fabricante Hermann Miller. La relación entre ambos comenzó con la ilustración de un artículo escrito por George Nelson llamado “Cómo realizar una mesa”. A raíz de este dibujo, fue cuando al diseñador Noguchi se le ocurrió la idea de plasmar dicha mesa en la realidad, y así fue como nació.
Realizada en cristal y madera o piedra, la mesa Noguchi es uno de los primeros diseños orgánicos que se crearon como tal. Su forma proviene de un estudio de estabilidad realizado por el propio escultor. Está formada por tres piezas, dos de ellas suspendidas en el aire. El diseñador, característico por sus formas biomórficas en muchos de sus diseños, creó las patas de esta mesa de manera que imitasen las formas de la naturaleza.
El éxito de su obra radica en la perfecta síntesis que realiza entre Occidente y Japón, entre la abstracción y el uso milenario de la piedra. Así, la mesa Noguchi es un claro ejemplo de esta mezcla. Cuenta con marcados aires orientales, pero siendo un diseño para “casas occidentales”, modernas y minimalistas. Hoy en día, la sigue comercializando Hermann Miller.